Las cinco ¿mejores? frases que
los realities nos han dejado (y que no tendremos que devolverles)
Tres nuevos canales han llegado a la
TDT española en los últimos meses: TEN, DKiss y BeMachote, o algo
así. Creo que ha pasado el tiempo suficiente para abandonar toda
esperanza y reconocer la cruda realidad, o la cruda tele-realidad,
porque toíta su programación se basa en realities.
La pregunta ahora es ¿Qué poso
dejarán en nuestras vidas aquestas nuevas (si es que no son las
mismas, que vete tú a saber) novias obsesionadas por el escote
corazón ?
Porque los realities nos han abierto
la ventana a todo un mundo de conocimiento, y gracias a ellos ahora
sabemos cómo se fabrican las tarrinas de tres sabores de helado (aunque no, a quién le gusta vainilla cutre o la fresca chiclosa),
cuánto vale una petaca de la Guerra de Secesión americana o que
shore en inglés significa "playa choni".
Aunque lo más importante es que han
incrementado nuestro acerbo acervo lingüístico, signifique esto lo que
signifique, con unas cuantas expresiones y frases hechas.
Revisemos cuáles han sido las
¿mejores? Helas aquí, en (poco riguroso) orden de menor a mayor índice de machaconería.
5.- El líder de la manada
César Millán, un señor bajito
campeón mundial en la categoría de imitar caras de perretes y en la
de ir en patines tirados por el mayor número posible de perros a la
vez, decidió un día rentabilizar estas habilidades (de tan dudosa
aplicación práctica) y creó un programa en el que aseguraba poder
educar a dueños de mascotas de todos los Estados Unidos de América.
Y en cuánto la pareja de turno - chica
rubia de Ohio y su novio surfero - aprendían
a dar la patita y a hacer sus necesidades fuera de la alfombra, se
ganaban el respeto de sus perros que llenos de alegría por tales
avances, dejaban de morder al cartero y a la tía Barbara Sue.
Aunque en el programa se mostraba un
letrero que advertía claramente que no se debían imitar las
técnicas del "susurrador de perros", les faltó avisar de
los peligros de repetir sus coletillas sin supervisión. La terrible
consecuencia es que a la que te cruzas un parque con un par de
mascotas acompañadas de sus humanos, no es difícil que escuches
aquello de la "energía tranquila" o "el
líder de la manada".
Hace apenas unos días escuché en una
terraza a una chica que afirmaba "Todo irá bien si Pancho es
sumiso" algo que me dejó sumida en tal estado de confusión que
aún me estoy preguntándome si el tal Pancho será un amistoso
pastor alemán o un humano candidato a hacer buenas migas con el tipo ese de las 50 sombras pseudo-grisáceas.
4.- Tienes que dar un paso adelante
Frase comodín del jurado de cualquier
talent show (o lo que los profesionales llamamos "Operación
Triunfo de lo que sea") cuando no sabe qué decirle a algún
pobre incauto que pretende ganar un concurso de no sé...,
tatuadores, tatuando lo mejor posible y no dando pasos adelante, que
se le va a correr toda la tinta y aquello le va a quedar el pectoral de un fulano (que quiere que una sirena encima de una calavera le recuerde que dejó las drogas para dejar de ver esas cosas raras) hecho un
asco.
Otra cosa sería que el concurso fuera
de muchachas aspirantes a modelos porque yo, que aprendí todo lo que
sé sobre ese mundillo de "Cristal", os puedo decir que en
el mundo del "modelahe" es muy conveniente dar un paso
adelante, después otro, y si la pasarela es más larga, incluso otro
más, y después pararse un momento y mirar con cara de sufrir de
reflujo intestinal hacia el infinito.
A veces la frase se sustituye por
"Pasar al siguiente nivel", algo que vendrá genial cuando
se emita un concurso de adictos a los vídeo-juegos.
3.- La zona de amigos
Este es mi pequeño réquiem por ese
canal (semi)difunto: la MTV.
Aunque se creó como una cadena
dedicada a los vídeos musicales, cuando llegó a nuestras teles en
abierto más bien parecía haberse enfocado en realizar un estudio sociológico empeñado en demostrar la estulticia del
adolescente medio.
Así conocimos a mozos que creían que
la mejor manera de conocer chicas era enseñar a hacer surf a sus
futuras suegras. A muchachillas que "tenían citas" con
futuros senadores de los USA elegidos por sus padres para ver si le
gustaba más que su novio okupa. Y a dependientes de un MacDonalds de
Ohio que comenzaban a sospechar que su novia por internet de hacía
años fuera realmente la finalista de Miss América que afirmaba
ser...
La citada alusión a "la zona de
amigos" constituía más o menos el 40% del monólogo que
mantenían frente a la cámara mozalbetes y mozalbetas que - quién
sabe cómo- habían llegado a la conclusión de que la mejor manera
de confesarle su amor a su mejor amigo/a era delante de las cámaras
de la MTV.
Sin presiones, vaya.
Era uno de los programas más bizarros que ...
- Oye, que "bizarro" en castellano significa valiente, arriesgado...
¿Y acaso no hay que ser un rato valiente para soltarle esto a tu mejor amigo, y más aún sabiendo que le estabas poniendo en bandeja "Es
que... yo te veo como un amigo/a"?
2.- Cocina de concepto abierto
Directamente desde Canadá, la tierra
donde que una familia de cuatro personas viva en una casa de menos de
doscientos metros cuadrados se considera hacinamiento, llega
nuestra medalla de plata y la gran aspiración de las parejas que
dudan entre qué será más malsano para su relación: pasar por una
obra o por una mudanza.
Canadá, todos lo sabemos, es un país de grandes espacios abiertos: grandes bosques, grandes lagos... pero el mayor espacio abierto está en las cocinas.
La obsesión de los propietarios
canadiense por las "cocinas de concepto abierto" solo
rivaliza con los suspiros que lanzan cuando piensan en "sótanos
acabados" o si acaso, su fijación por colocar la lavadora en el
punto geográfico más distante posible de su ubicación habitual en
la casa. En Ohio, a ser posible, buscando una secadora con la que que
chateaban por internet.
Lo que es un gran misterio es por qué
se levanta ni un solo tabique en ese país, sabiendo como sabemos
todos a este lado del charco, que no hay propietario en Canadá que
no eche de menos tener el famoso concepto abierto ese para poder
invitar a mucha gente a charlar con ellos mientras preparan la
comida.
Por cierto, si alguna vez os invita a
comer un canadiense a su casa y te dice que la comida es a la una, ni
se te ocurra aparecer por su casa más tarde las siete de la mañana,
que no veas la ilusión que les hace tenerte ahí mirándoles
mientras evisceran el pescado, por poner un ejemplo.
Y en nuestro primer lugar, la única,
la inigualable, la frase que no falta en ningún talent show,
reality de convivencia, de supervivencia o lo que sea...
1.- No he venido aquí a hacer amigos.
Pues sí, si algo nos ha enseñado la
televisión es que no hay cantante, decorador, diseñador de moda,
cocinero profesional, cocinero aficionado o cocinero aficionado menor
de trece años que se haya apuntado a un concurso de este tipo a
hacer amigos.
Recordad: más importante que cantar bien, saber
tatuar, tocar las bandurria con los pies o, si careces de cualquier tipo de talento, haberle puesto nombre a tus abdominales o "dar juego",
lo realmente importante para que te escojan en el cásting de
cualquier reality que se precie, es no tener el más mínimo interés
en hacer amigos.
Normal, porque si tienes amigos,
después hay que invitarles a comer a tu casa y ya estás metido en
obras para conseguir que te quepan en tu cocina de concepto abierto.
No sé vosotros, pero yo estoy
firmemente convencida de que el mundo de los reality implosionará
el día que se haga uno cuya finalidad sea "hacer amigos".