viernes, 23 de diciembre de 2011

Navidad Calamar

Piiii-piii-piiiii (esto, os teneís que hacer a la idea que es el sonido de un matasuegras)

¡Qué juerga tenemos en las galeras, chicos! Aquí estamos de fiesta, dándolo todo, lo estamos pasando chupi lerendi, no se lo ha querido perder nadie:

Los que remamos encadenados, los patrones del barco, los piratas berberiscos de la competencia que siempre nos ganan en la liguilla de waterpolo, los monstruos abisales y la princesa secuestrada.

No hace falta más que la tuna para que me tire por la borda.

Nos hemos querido juntar todos porque en días como hoy, hay que olvidar los rencores del pasado y así poder generar los rencores del futuro.

20:30 - Para empezar la fiesta, los galeotes hemos creado una coreografía muy simpática que simula que el de la ocarina baila claqué por el tablón ese que no sé cómo se llama.

Vale, a él no le parece tan graciosa, pero es que siempre tiene que haber algún aguafiestas. Y nunca mejor dicho.

Por cierto ¿quién instala eso en los barcos piratas? ¿Viene de serie por si surge hacerle la puñeta a algún prisionero?

21:00 - Nos felicitamos las fiestas, y nos sentamos a cenar en plena armonía.

21:15 - Pequeña escaramuza al comprobar que no había croquetas de ibéricos para todos. Se escuchan los primeros “Yo por esto, no pago 35 euros”.

No serán los últimos

21:30 – Se retiran apresuradamente unos calamares a la romana de la mesa, que habían herido susceptibilidades al mismo tiempo en los prisioneros de Roma y en el sector calamar.

22:45 – Después de esperar los segundos más de 50 minutos, se descubre que no había ni chuletón ni dorada a la espalda, sino palitos del capitán Pescanova para todos.

Amplio disgusto de la concurrencia. Tres merluzas abandonan la cena muy ofendidas.

23:15 – El postre consiste en flan de la casa a compartir entre cuatro, en mi sector, el pez ese abisal con la lucecita (que da mucho ambiente) dice que a él el dulce… y nos lo repartimos un tentáculo, el loro del capitán y una servidora.

Suspiro, no sé si por lo lejos que quedaron mis planes de sentarme al lado del guapo de torso descubierto, o por lo malo del flan.

23:35 – Café y licores variados, hay ron, ron, ron y la botella de ron también.

Nadie viene a recoger los platos, quizá porque todo el servicio de cocinas ha huído, después de ver cómo pasábamos por la quilla al cocinero.

Hay gente que no sabe cómo tomarse una broma.

00:00 - Si creéis que vuestro compañero es un pelma al que se le va la manita con las compañeras en cuánto se toma dos copitas, es que no habéis ido de cena de empresa nunca con un pulpo gigante.

00:15 - Tengo que ir al baño de chicas

00:20 – Hay cola en el baño de chicas.

00:45 – Sigue habiendo cola en el baño de chicas.

00:50 – Consigo entrar en el baño de chicas.

00:52 – Me arrepiento de haber entrado en el baño de chicas.

01:40 - El capitán del barco se está batiendo en duelo con dos de los esclavos romanos que, a falta de armas, utilizan el ataque verbal.

02:30 – Descubro que el pirata chino que está en todas las tripulaciones es mi mejor amigo en el mundo entero.

02:40 - El chino y yo cantamos abrazados "Manchuria tierra querida"

02:42 - ... Manchuria de mis amores

02:43 - ... Quién estuviera en Manchuria en todas las ocasiones.

02:55 – Descubro que el chino era del otro barco, y en realidad no le conocía de nada.

02:50 – Me pregunto cómo ha terminado el chino con los berberiscos.

02:55 – Me pregunto de dónde narices serán los beberiscos.

02:58 - Le repito la palabra berberisco muchas veces y muy alto a todos los invitados, porque me parece muy graciosa.

03:15 - Estoy intentando guardar el equilibrio en el tablón.

Bueno amigos, aprovecho mis últimos minutos de vida para desearos:

FELIZ NAVIDAD

CALAMAR



Y si no funciona, recordad que Dios creó las navidades para que apreciaramos más el resto del año.

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Más refritos desde ultratumba

Consigo emerger desde las galeras donde he sido condenada a remar día y noche, Fiesta de la Constitución incluida ¡Con lo de la constitución que soy!.

Lo malo no es remar, no, no.

Ni el rancho, y eso que me hace desear que me inviten a comer a cualquier sitio.

Ni siquiera los monstruos marinos que nos atacan en días alternos, que digo yo, señor cocinero, que con tanta abundancia de materias primas, ya podrían aprender a hacer el pulpo como Dios manda.

Oye, que de verdad, qué cansinos los cefalópodos, eh? Que ya la podrían coger con alguna otra embarcación, no sé, a ver que se me ocurra un barco... el Bribón, por ejemplo.

Pues nada, siempre con nosotros, y cada dos por tres se oye:

- ¡Todos a sus puestos! ¡Zafarrancho calamar!

Así que nada, me toca ponerme la espada esa curvada en la boca, y a lanzarme en liana.

Que no sabéis lo difícil que es conservar el equilibrio en una liana, sobre todo cuando te lanzas desde un barco, que está en movimiento y encima estás preguntándote si no había un sitio mejor para llevar la espadita, que hombre por Dios, si a mí me salen boqueras con nada.


Pues eso no es lo peor, que conste.

No, lo realmente malo es el ritmillo ese que como no han encontrado a un tío forzudo que toque el tambor, nos pusieron a uno que tocaba en el acordeón "Bésame mucho" y "Qué tiempo más feliz", que todo el mundo sabe que es lo único que se puede tocar en una acordeón.

La semana pasada, un motín capitaneado por mí misma, acabó con la misteriosa caída del acordeonista por estribor.

Y ahora, tenemos a un tío con interpreta a la ocarina "Yesterday". Quiero morir.

Lo único que me salva es que, esto que no salga de aquí ¿eh?, hay un chico que me gusta. Ji, ji, ji.

No sé mucho de él, pero debe ser extranjero porque se llama Ben.

Yo creo que también le gustaré, porque quizá alguno no lo sepa aún, pero yo, soy muy bella.

Pues sí, me gusta, no voy a negarlo, de hecho tengo una teoría al respecto.

Si tú dudas sobre tu orientación sexual, lo que tienes que hacer es ver Ben Hur, y si cuando sale Charlton Heston remando en el barco ese, donde la ropa se le ha roto estratégicamente, dices:

- ¡Cómo nos hemos puesto en las galeras!

Y eres chica, eres hetero, y si eres chico, pues no lo eres.

Si no lo dices, pues no se demuestra absolutamente nada.

En ese caso, hay una prueba que es realmente infalible y lo que tienes que hacer es... ah, oh, glups, lo siento... una ola... socorro.... glu-glu-glu.

jueves, 1 de diciembre de 2011

Selebreison

Aviso a la población reclusa:

Amigos, hoy es un día de celebración y jacaranda porque hemos alcanzado la redonda cifra de (redoble de flautas dulces, por favor)

¡¡Doscientas una entradas!!!

Así que para celebrarlo por todo lo alto, el equipo creativo de este este blog (el teclado y yo) vamos a invitaros a algo.

Venga, teclado, sácate algo, no el Ctrl, no hombre: Vamos a sacar unas rosquillas muy ricas que mi tía insiste en traerme del pueblo, son de argamasa y azúcar blanquilla, dice siempre que me las da:

- Como a ti te gusta el dulce...

Y me mira con carita de pena, como diciendo "Desde luego hija, vaya porquerías que coméis los que os gusta el dulce".

Y es que es hora ya de denunciar esta situación: Tradicionalmente en España se ha odiado mucho a los golosos.

Es la única explicación de que desde tan variados rincones de nuestra geografía patria, se hayan lanzado tantos atentados contra nuestro paladar, nuestra dentadura y por supuesto, nuestro nivel de hidratación.

Y si no tuviéramos bastante con todo ese amplio muestrario de pastas que hacen bola, caramelos más resistentes que la caja de negra de los aviones y el turrón "duro" (al que por lo menos, hay que reconocer su sinceridad), aún nos quedaba lo peor: La fruta escarchada.

Venga, saco las pastas, y si la cosa se alarga, puedo comprobar si aún queda contenido líquido de una botella negra que tiene la forma de cabeza humana, y que robé del botellero paterno, donde llevaba abierta desde el último especial de nochevieja de Martes y Trece.

¿Os parece cutre? Pues os habéis librado de una lata de banderillas que me regaló alguien (que pretendía que no le volviera a invitar a mi casa jamás), porque las he visto escabulléndose hace un rato.

Si nada de esto os place, aún me quedan unos ricos refritos con los que amenizar la velada. Venga, que peor sería que os obligara a bailar la raspa todos en fila.

Os presento pues, “lo de" cuando fui testigo de que la atención al público es muy sufridita, cuando fui a renovarme el pasaporte, el pasaporte anterior al que tengo ahora, que no sé ni si había abierto la botella de pisco.

Alguno habrá que sea relativamente nuevo en este blog (hay gente para todo) y al que le sorprenda saber que fui guionista de televisión y que me robaron ideas que magníficas series, como esta tan glamurosa

Y esta es para auténticos históricos ¿Cuántos sabíais que soy la víctima de un complot criminal de extrañas ramificaciones?

Bueno chicos, que sí, que últimamente no puedo actualizar el blog, pido disculpas humildemente y el que no se conforme con eso, que recuerde que aún me queda mazapán de la primera cesta de navidad que me dieron en mi vida.



viernes, 18 de noviembre de 2011

Ropa interior

Hace muchas décadas, tuve una compañera de piso que era norteamericana.

Ea, ya está, ya se ha acabado la anécdota ¿Qué pasa? Nadie dijo que tuviera interés ningúno.

Vale, seguiré, pero luego no me digáis que es muy larga la entrada.

No sé por qué cuando, en aquellos tiempos, le contaba a la gente que mi compañera era de yuesei, solían imaginarse a una atractiva rubia de larga melena que movía de forma sinuosa, cuando salía de su hermandad.

Y que se había traído hasta Madrid su ondeante melena y su jerseycito rosa sobre los hombros (cuando eres pijo, los hombros se enfrían mucho más que cualquier otra parte del cuerpo, como es bien sabido)

Y aquí viene la enseñanza de esta historia: Cuán grande puede llegar a ser la distancia entre ilusión y realidad.

Pues no, esta muchacha no pertenecía para nada a ese estereotipo, y su look, menos. Pero como no tengo a mi disposición documentos gráficos que lo acrediten, os contaré un breve intercambio de impresiones que tuvimos en aquellos tiempos.

Un día de esos tontuelos de otoño, le comenté que no sabía qué zapatos ponerme porque con los de invierno pasaba calor y con las sandalias frío, me contestó:

- Pues ponte las sandalias con calcetines.

Ya está, ya lo he dicho, sé que ha sido duro, pero hacía falta: Sandalias con calcetines. Supongo que blancos, como de tenis.

Resumiendo: Además de una falta total de sentido de la moda, poseía esa cualidad de la que tanto alardean los clientes de Ing Direct: Ahorradora.

Peligrosa combinación a la hora de vestirse.

¿No pensais que fuera para tanto? Vale, pues os diré que:

1) Tenía dos hermanas.

2) Ambas hermanas se casaron, con algunos años de diferencia, una de ellas con un señor con sombrero vaquero (no viene a cuento, pero es que me he acordado)

3) Fue a la boda de sus dos únicas hermanas con el mismo único vestido.

Perdón, perdón, creo que he cometido un error: Con el mismo único horrible vestido.

Creo que fue el mismo que llevó la mujer del pastor O'Malley a aquel picnic en 1943, que hasta su marido, le dijo "Barbara Mai ¿Es que no tienes algo más alegre?".

Yo me imaginaba a la familia ordenando fotos, una tarde cualquiera, años más tarde:

- Esta foto es de la boda de una de las niñas... ¿de quién?

- No sé, reconozco "El Vestido de las Bodas" de Susan, ahora lo que me faltan son pistas para saber CUÁL de las bodas fue.

La verdad, a mí estas historias ya me sorprendían poco, porque la más cruda realidad se mostró antes mis ojos, cuando la ínclita llevaba unos pocos días en el piso y hablando de cualquier cosa que no venía a cuento, me dijo:

- Yo prefiero las bragas de algodón.

No sé de qué os sorprendéis, es un tema como otro cualquiera para hablar en tu nuevo piso compartido, ya se sabe:

- Bueeeeeno ¿y hay algún Mercadona por aquí cerca? Por cierto ¿sabías que prefiero usar bragas de algodón que de lycra?

- Precisamente te lo iba a preguntar ahora mismo, porque llevas ya tres días en el piso, y tengo una pregunta que me carcome "¿Cuál es tu opinión sobre la ropa interior de fibras sintéticas?"

Volviendo a nuestro piso, después de esa declaración, yo le contesté

- El tema de las bragas, interesante donde los haya.

Mentira cochina, yo nunca digo esas cosas, y entonces que era joven y que no iba camino a ser la señora que se cuela en el bus, solo contestaba cosas muy correctas, así que si hay algún amante de la veracidad en la sala, que sustituya mis líneas por varios "Ah ¿sí?. Vaya, Ummm..."

Volvamos a cómo continuó Susan, porque sus líneas, son reales:

- Pues sí, prefiero el algodón, es que no me gustan nada las bragas de otro tipo.

- Aaaah, ya ¿No te han enseñado en clase de castellano a hablar de algo más interesante? No sé, algo del tipo "Me llamo tal, tengo tantos años, tengo dos hermanas y voy a sus bodas con la misma ropa..."?

- Y en Estados Unidos, es dificilísimo encontrar bragas de algodón.

- Mira, una cosa que jamás me he preguntado sobre ningún país del universo, me lo apuntaré por si me presento a El Tiempo es Oro, y en Su Tema, puedo escoger "Bragas del Mundo".

- Y fíjate, un día estaba yo con mi madre intentando comprar bragas de algodón...

- ... me pregunto si esta no es la peor manera de empezar una anécdota

- Y me dijo que las que había eran carísimas

- Y en tu familia sois de poco gastar ¿A que sí?

- Pero que curiosamente, lo que llevan los hombre ¿cómo se llama?

- Cromosoma Y, creo.

- Ah, sí, calzoncillos, pues que los calzoncillos son de algodón 100% y mucho más baratos.

- Creo que no me gusta cómo va a acabar esta historia

- Y entonces, me compré unos cuántos que de algodón y muy baratos.

Exclamó muy feliz, mi compañera ultramarina.

- Todos nos dejamos llevar por compras impulsivas a veces.

- Y desde entonces, solo compro esos calzoncillos.

- Y yo que creía que lo peor de tu ropa ya lo había visto, ahora lo de las sandalias con calcetines, me empieza a parecer mejor...

Ah, si creíais que iba a decir "¿Y esto, por qué me lo cuentas?", os diré que la respuesta estuvo ante mis ojos, un par de días más tarde, cuando tendió la primera colada.

Ante mis ojos, y ante los de cualquiera que viniera al piso, porque el tendedero estaba (oh, desgracia) en la terraza del salón.

Así, un día, una amiga me dijo:

- Me parece bien que venga el novio de Mª Carmen (la "tercera muchacha"), pero hombre, que le hagais la colada...

- Querrás decir que venga su padre. Porque estos ¿cómo se llaman? Ah, sí, calzoncillos, blancos, son "modelo de padre".

Venga, si todos los conocemos: Tan resistentes como antieróticos. Que sí, esos que son buenísimos como trapos, venga, para limpiar cristales son únicos.

Y al parecer, muy baratos, mucho más que comprar trapos, yo de hecho, estoy por comprarme 20 y dejar de comprar bayetas (que total, viene a ser el mismo razonamiento)

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Búsquedas que no son de este mundo

Tengo en mi poder pruebas que demuestran que nuestro planeta (y otros con wifi) está plagadita de alienígenas.

¡¡Están entre nosotros!!! (gritando desaforadamente)

Y lo que es peor: Tienen acceso a guguel.

Y esos seres de otros planetas que, perdidos como se encuentran, buscan cositas en internet pensando que ello aclarará sus dudas sobre nuestra especie.

Naturalmente, no encuentran nada, pero angelicos, pero comparten con nosotros sus cuitas, problemas sentimentales y sobre todo morfológicos y gramaticales.

Ahí van unas cuantas búsquedas que demuestran este hecho irrefutable, tal cual las he copiado, acompañadas de mi certero comentario, porque digo yo que si el blog es mío y me he leído 370 búsquedas, podré decir que mis comentarios son certeros si quiero ¿no?

Para el que no esté familiarizado, o el que quiera un ranking de cosas más buscadas, os diré que los extraterrestres, por algún extraño motivo, están ámpliamente interesados en las teorías psiconalíticas y que es difícil que escriba cualquier cosita (propia de mi mente torturada) en este modesto blog y no le surja a alguien una duda respecto al tema en cuestión y su relación con el mundo del psicoanálisis.

Mi favorita de las cientos que aparecen es sin duda "Los tres chanchitos psicoanálisis"

Nota: Si en el próximo mes no registro ni una sola búsqueda "comentarios certeros psicoanálisis", me corto la coleta.


indiana y acompañante cena en el arca perdida

Amigos neptunianos, aviso importante:

Si un terrícola os aborda a altas horas de la noche, luciendo látigo y chupa de cuero, so pretexto de que en su piso vais a encontrar grandes hallazgos, no os fiéis, luego no son para tanto.

la princesa lo prueba y no le avisa nada

Es que "Las casas reales" de la tierra siempre han sido de poco compartir, ya os lo advierto.


como se llaman los cuadros que te miran desde cualquier angulo?

Paranoico, creo.

Porque veo en la RAE que "emparanoiante" no existe, pero no creo que a un tío que escribe desde Plutón (y que todavía está de capa caída desde que les quitaron la planetariedad), sea tan tiquis miquis, vaya.


en psicoanalisis significado de puma

En el planeta tierra hay un continente que se llama América, en ese continente hay un felino. Y este felino, tiene problemas no resueltos con su madre.


los tres cohinitos y el lobo feroz escrito en espanol quiero leer

Me parece bien, es todo un clásico.


mientras yave me de prosperidad en la tierra que es mi herencia y que ha psado a ser miang

A este alienígena le llegaron mezcladas las señales de dos programas terrícolas: "Pueblo de Dios" y el Teletienda de "El Té del Doctor Ming".

Advertencia a viajeros siderales y a pequeños saltamontes: Ploglamación de domingos pol mañana telible ser.

(Aviso para terrícolas: Comprended que para un marciano a lo mejor estos chistes de chinos de sainete, aún parecen originales)

pamelas y ventiladores

Al igual que pasamos por una fase de mezcolanzas entre películas románticas y de vampiros. De alienígenas (hola de nuevo) y cowboys y súper héroes haciendo full monty, creo que se nos avecina una terrible moda:

Una combinación entre Cuatro bodas y Twister: "Pamelas y ventiladores"

O sea, cine de catástrofes, en toda la extensión de la palabra.

significado+de+%22a+quien+dios+se+la+d%c3%a9%2c+san+pedro+se+la+mendiga%22

Si es esto no demuestra una transmisión interestelar interceptada por la NASA, de un neptuniano pedigüeño, que venga Dios y lo veo.

Y San Pedro, que se la mendigue.


psicoanalisis resfranes

Véase como mi teoría es cierta, en las academias de castellano/alfacentaurense, se enseña en primero a escribir bien "psicoanálisis" y es de nivel avanzado deletrear "refranes".


el caso de la señora estupendita (teatro)

- Oye, Vane, ¿De qué obra de Mihura has hecho el trabajo de Mihura, de "El caso de la señora estupenda" o de "El caso de la mujer asesinadita"?

- Ah ¿Pero que eran dos?


que+pasa+cuando+los+gallos+bostezan

Que tienen sueño. Aquí en la tierra, es que madrugan mucho.

bochorno de calor dentor el

Bochornoso, estoy de acuerdo


monito asiendo sushi

Este se apuntó al curso de "Japonés de pega / Venusiano", y claro, así le va.


como se llama la cancion que dice dime porque la gente no sonrie

Esta la cosa en este planeta como para sonreír mucho, hijos.






Y mi búsqueda favorita de esta galaxia es la del San Pedro pedigüeño.

jueves, 20 de octubre de 2011

Es una lata el trabajar ( y II)

En vista de que ni un solo lector de este blog (por lo menos de los que comentan) tiene un pariente rico, o futura pareja a la que explotar.

Y que encima algunos hasta tenéis principios y no estáis dispuestos a vender los bienes de vuestros ancianos padres para compraros un apartamento en Marina D’Or (Ciudad de Vacaciones), mientras ellos subsisten de los bocatas que les dan como público en los programas de Tele 5, dos cosas os voy a decir:

Una: Así no vamos a ninguna parte

Otra: La fórmula “Muchos escrúpulos y pocos contactos”, no ha retirado de trabajar a nadie.

Espero que hayáis recapacitado seriamente sobre esto. Venga niños, que no va a haber represalias, venga, a la de tres, eso sí, os advierto que no nos iremos a casa hasta que aparezca el culpable, o alguien lo suficientemente inocente como para creerse esta promesa.

Veamos pues otras opciones igual de clásicas, e igual de inviables a la última parte de este magnífico díptico.

¿A que si dices “díptico” parece que estás diciendo algo mejor que “segunda parte” , y si dices “trilogía” queda mejor que “Hicimos la tercera parte de la película aunque ya la segunda fue lamentable”?

-Hacerse perroflauta


Este es un clásico contemporáneo a menudo mencionado en este blog, si tuviera la más mínima idea de dónde, adjuntaría algún enlace, pero la verdad, estaría mal que me pusiera a trabajar en una entrada sobre este tema.

Como su propio nombre indica, para llevar a cabo esta opción hacen falta dos elementos básicos: Una flauta dulce de plástico y un perro

Pero que esto no os alarme, si seguís mis consejos, esto requiere una inversión mínima, e incluso (como el sentido del humor de los de recursos humanos), inexistente.

- Flauta de baja calidad que se pone sustraer de la primera mochila de Hanna Montana que encontremos.

- Engañar para que nos siga a un pobre perro que encontremos despistado por la calle, y que se le vea poco aficionado a la higiene corporal. No se le debe lavar hasta que te lo pida o se compré el champú él solito, lo que ocurra antes.

Este tipo de vida alternativa requiere una cierta actividad de carácter musical, siempre y cuando se consiga aunar una total falta de ritmo y armonía, en la misma ejecución.

Yo para esto (lo de tocar la flauta peor que maneja su dicción un joven actor español) me veo totalmente capacitada.

Sin embargo, una vez me quise hacer “de esto” (además de porque intenté lavarme el pelo el tercer día), me echaron porque era totalmente incapaz de hacer nada con los trompos esos.

En mi CV antes tenía puesto: “Demasiado torpe para perro flauta.”

Por cierto, si decidís imitarme descubriréis, de la peor manera posible, la endémica falta de sentido del humor que tienen los encargados de selección de personal.

Delincuente:

Hubo un tiempo, mis queridos lectores, en que si ibas por ahí, dando patadas a las latas con cara de joven en el que descansa el peso del futuro del país (“cara-tonto” creo que se llama) y te encontrabas a un amigo y le decías:

- Jo, tío, no sé qué coger, si letras o ciencias, no sirvo ni pa’estudiar ni pa’trabajar.

Y te contestaba con juvenil entusiasmo:

- Mi primo se ha hecho bombero, gana un pastón, no curra nada y es un trabajo para toda la vida.

- Pero ¿no es una oposición? ¿no habrá que estudiar mucho?

- Nada hombre, un par de temas y la tercera cartilla Rubio.

- ¿Y nada más?

- Bah, unas pruebas físicas de nada.

Sí, amigos, esto ocurría. En serio, tanto, tanto, tanto ocurría, que ahora es más fácil ser medallista en triatlón que aprobar.

Y todo esto viene porque esta opción (aunque parezca tentadora a primera vista) de caer en el ramo de la delincuencia organizada (o la española), no es tan buena cómo parece. ¿Por qué? Pues porque está saturadísima.

Nada chicos, ya no quedan plazas, está eso que ni primero de Derecho.

Si aún así no he conseguido convenceros de que abandonéis la senda del crimen, os pediré que por lo menos no hagáis nunca dos cosas por favor. La primera es que nunca hay que decir:

- Este va a ser un golpe limpio. Sin problemas, no vamos a disparar un tiro

Y sobre todo, lo más importante es recordar que en todo hay un límite, unos principios. Y que pase robar, pase secuestrar e incluso cometer un par de asesinatos de vez en cuando, pero, por favor, jamás, jamás, jamás seais directivos en una agencia de calificación de riesgos.

jueves, 13 de octubre de 2011

Es muy extraño el trabajar (Libro de Soluciones)

Ha llegado el momento, amigos y amigas, en que se resuelva esta cuestión, más polémica que cuál era la profesión del padre de Marco.

(Venga ¿qué era? No vale mirar en la wikipedia)

Así entre nosotros, que no se entere nadie, pero he dicho lo de polémica porque me he dado cuenta de que vende mucho.

Como cuando decían "El cuerpo del delito. La polémica película de Madonna".

Que no-hombre-que-no, que esa película no es polémica, es mala.

Oye, en serio ¿la habéis visto? Yo, diez minutos y creo que soy la persona que más ha visto.

Existen leyendas urbanas que dicen que a partir del minuto 27 ya no continúa y ponen un corto de Disney.

Chip y Chop contra los Zombies, creo que es.

En primer lugar, a los que habéis dicho que todos son verdad, pues sí, tenéis razón, todo ha pasado. Pero no todo me ha pasado a mí.

Bueno, allá voy ¿preparados? que voy a resolver el enigma.

- Manolo, ven.
- ¿Tiene que ser ahora?
- Sí, sí.
- ¿No será otra vez lo de la sidra, no?
- No hombre no, qué va a ser eso, que va a salir Durao Barroso en la tele, y va a contar cuál es el secreto de su pelo.



1) Sospechosa habitual.

Solo los que conocéis mi personalidad secreta sabíais que esta era imposible, porque sí he estado en ruedas de reconocimiento, pero porque tengo una ficha policial más larga que el Paseo de Extremadura.

Y estoy buscada por la Interpol por los golpes maestros que he dado en casinos de todo el orbe.

Como el célebre golpe de las vinajeras del buffet del casino de Torrelodones.

Por lo que sé, es muy normal que los que trabajan en una comisaría terminen pasando por dichas ruedas, e incluso a veces fichan a algunos que pasan por la calle.

Es más, la primera vez que me detuvieron (ah, qué tiempos!) me llamó mucho la atención que todas las de la fila, menos yo, cuando terminó aquello, se pusieran a hablar entre ellas.

- Qué vamos ¿dónde siempre?
- Esperad, que cojo el bolso
- ¿Alguien comparte media barrita?

Pues no, nunca he trabajado en una comisaría, pero debe ser uno de los pocos centros de trabajo donde no han tenido el inmenso placer de aparcarme en cualquier cubículo no pensado para que un humano pueda trabajar, y a veces ni respirar.

De hecho, durante tres meses, estuve trabajando en la mesita de recibir del ante-desapacho de un subidrector que estaba de baja, o había huido, no sé.

Ahí pasaba unas 12 horas diarias de media, y no pasaba más, porque los de seguridad tenían que cerrar el edificio (sí, es cierto).

Quizá por eso sufría periódicos ataques psicóticos como aquel que me llevó a cantar a voz en grito (sí, es cierto):

- ... de por qué te estoy queriendo, no concibo la razón...

En el justo momento que el subirector que ocupaba el despacho contiguo pasó por ahí (sí, es cierto).

Se ve que el hombre desconocía la discografía de Nino Bravo y pensó que me estaba declarando porque salió huyendo de ahí.

Pues tú te lo pierdes, chato.


2) Azafata de Congresos.

Científicos de la Universidad de Dakota del Norte están haciendo un estudio (en dura competencia con la Universidad de Arizona que a lo mejor se les adelantan) para saber si los hombres preguntan lo de que si la chica está incluida en el coche porque:

a) Se creen muy picarones
b) Se dieron un golpe en la cabeza de pequeños
c) Se creen muy picarones porque se dieron un golpe en la cabeza de pequeños

Pero sí, me consta que lo dice un porcentaje realmente preocupante de la población masculina.

Pero no me consta porque estuviera ahí presente, así que supongo que aún puedo sentirme afortunada.

De todas maneras, me temo que no ha resultado muy verosimil, creo que de hecho ha sido la opción menos votada.

Yo yo a cambio, me he humillado confesando que he visto "Showgirls" y hoy por el mismo precio, "El cuerpo del delito". Quizá debería plantearme algunas cosas sobre mis elecciones cinematográficas.

Me pregunto si aquel golpe en los columpios....


3) Medidora de osamentas


En realidad, Mª Carmen sí estaba en la oficina, pero cuando le preguntaron que qué estaba haciendo contestó que algo de vital importancia, que no se podía parar bajo ningún concepto.

No sé, desactivando una bomba junto a Jack Bauer, o algo así.

Yo, menos experimentada, cuando me preguntaron qué estaba haciendo dije:

- Aquí, esperando que me caiga un marrón del quince.

Y sí, me cayó, y sí, entraba en los despachos y sí, se reían de mí, y sí, iba paseando una cinta métrica de esas que se cierran solas cuánto menos te lo esperas haciendo "prussss" seguido de "Ayys".

No, los cuernos de aquel señor no los medí, pero los tenía, y muchos. Él sabrá por qué los exhibía así, sin pudor alguno.

Dios, cómo odiaba entrar en aquel despacho lleno de cabezas cercenadas de animales muertos, y yo venga a preguntarme cómo podría Bambi ir por ahí sin cabeza.

Pero a veces, pocas la verdad, llega la venganza a nuestras vidas: Un día vi cómo varios operarios sacaban de la oficina las testuces aquellas.

- ¿Qué pasa?
- Nada, que a Severino se le ha llenado el despacho de chinches y le tienen que fumigar.

Nunca supe si fumigaron el despacho o a Severino, himself, ni falta que me hizo. Lo importante es que los cuernos nunca volvieron, supongo que pondría en su lugar cuerpos de maniquies rotos desnudos, para conseguir similar ambiente grimoso.

Y esta, niños y niñas, es la explicación de por qué Dios creó a las chinches.


4) Modelo de libros de idiomas.

Otro hecho real plagiado miserablemente por mí.

Me lo han contado por lo menos dos personas, pero no fue por obligación contractual, sino por amistad, que es aún una relación mucho más peligrosa.

También tuve una compañera illo tempore (llamémosla, por ejemplo, Mª Carmen) que me contó muy orgullosa que trabajó en un almacén de muebles, donde la pidieron que hiciera de modelo de un catálogo.

Después de eso, no me extrañó el éxito de Ikea.



Ahora lo importante: La ganadora en buena lid de este torneo, ha sido Ine a la que además, debo medio céntimo de euro. Pues ya sabes, Ine, puedes plantear un tema para que hable de él, si se me ocurre algo. Lo del pago del medio céntimo me llena de incertidumbre, lo confieso.

Fue la primera en dejar un comentario dando la respuesta correcta, aunque muchos más habéis acertado, enhorabuena, podéis celebrar vuestra victoria brindando con sidra El Gaitero, recordando siempre, que es famosa en el mundo entero. En Djibouti no se bebe de otra cosa.


Por cierto, médico, era médico.

martes, 4 de octubre de 2011

Es muy extraño el trabajar

En un día como hoy, francamente no me veo con cuerpo, ni sin él que aún sería más extraño, para continuar con la serie "Cómo vivir sin trabajar si es que tal cosa existe". Vale, no se llamaba así.

En todo caso y para "dinamizar" (signifique lo que signifique eso) el blog y animarnos en estos momentos con esta situación tan alegre, os propongo un concurso. Os dejo unos momentos para que os celebréis la buena nueva.

(Momentos de alborozo)

Me llegan noticias de vuestros comentarios:

- Hombre, eso sí que me ha alegrado a mí el día, me da igual lo que le pase a Grecia, que Loque hace un concurso.

- Manolo, saca la sidra El Gaitero, sí, sí, la de reserva, la que guardamos desde hace años. No la del DIA no, la de marca. A lo loco, Manolo, a lo loco.

Bueno, a lo que iba es que pensando en el proceloso mundo del trabajo, y de la permanente amenaza de la falta de él, me he acordado de las cosas más inimaginables que caber pudiera.

Bueno, que quepan y que me las hayan mandado a mí, aunque no tuvieran relación alguna con el trabajo que supuestamente desempeñaba.

Insisto, existe el noble y mal pagado (seguro) trabajo de limpia ventanas, pero ¿Qué pasa cuando eres, no sé, auxiliar de laboratorio y dicen que que limpies las ventanas?

Pues que solo te quedan dos opciones:

- Empezar por la izquierda, o por la derecha.

Vale, pues eso, os cuento unas cuántas cosas extrañas que me tocó hacer en el trabajo sencillamente porque temía engrosar las fatídicas listas, y no porque tuviera nada que ver con esas tonterías que ponen en tu contrato.

De acuerdo, solo una es verdadera. Y el primero que acierte, gana. Bieen, bien. Saca sidra, Manolo, sí, otra vez ¿Qué pasa? La ocasión lo merece.

¿Y qué gana? Caramba, qué materialistas. Bueno, pues que proponga un tema sobre el que quiera que debo escribir una entrada. Ese el premio, que no tengo ni sidra. Otra cosa es que realmente escriba sobre eso, que esto no es mi trabajo, y por fin, puedo decidir que no voy a ser:

1) Sospechosos habituales

Esto ocurrió hace algunos años, cuando dentro de los difusos márgenes de las atribuciones del trabajador de una ETT/Empresa de Servicios/Cómo lo queráis llamar, me tocó ir a hacer unos bolos a una comisaría del cuerpo nacional de policía.

¡Cómo mola! Pensaba yo, mientras me imaginaba como una de las protagonistas de CSI, bella por fuera y dura como el acero por dentro. O resolviendo crímenes a diestro y siniestro gracias a mi perspicaz olfato, como Colombo. O poniendo posturitas y corriendo mucho por ahí, movimiento la melena sin hacer nada en concreto, como Los Ángeles de Charlie.

No, no trabajaba a los 9 años, por qué lo preguntáis.

Como os podéis imaginar, todo consistió en estar a dos plantas de la comisaría de verdad "dónde está la acción", haciendo el trabajo administrativo más aburrido del planeta, en medio de un montón de expedientes de la época de Alfonso X el Sabio, donde el concepto de "nuevas tecnologías" se circunscribía a la máquina de escribir electrónica.

Hasta que por fin, llegó el momento de nuestra gran oportunidad, cuando una compañera y yo estábamos agonizando de aburrimiento en medio de tanto legajo y subió una funcionaria con cara de estar buscando a alguien, abrió la puerta de la pecera en la que estábamos nostras poniendo cara de trabajar mucho (ves, al final sí que hice un poco de Ángel de Charlie) y preguntó:

- ¿Está Mª Carmen?
- No, no está por aquí.
- ¿Y vosotros quiénes sois?
- Pues las que han venido a tal y cual y ...

Mientras, nos miraba de arriba a abajo sin hacernos ni caso, hasta que cortó nuestras torpes explicaciones:
- ¿Podéis bajar un momento a la comisaria?

Tate, me dije (que no, que no tenía 9 años), ya se han enterado de que robé unos tigretones en el año 87 y han venido a por mí. El crimen siempre paga.

Y mientras intentaba calcular cuánles serían los intereses de 125 pesetas y pasarlo a euros, escuche a mi compañera, que no sé qué causa pendiente con la justicia tendría pero juro que que pregunta con la voz temblorosa:

- ¿Para quéee?
- Para una rueda de reconocimiento.

Juro que nos miramos la una a la otra más sincronizadas que las gemelas que descubren que son gemelas en las pelis Disney.

- Si son solo dos minutos, si acabamos en seguida. Decía la mujer muy festiva.

Y ahí qué bajamos con ella, la verdad es que una vez que nos lo explicó y lejos ya del yugo de la justicia, íbamos tronchándonos de la risa, venga a hacer comentarios graciosetes y bromas de dudoso gusto. Creo que fue el único momento en que no estuvimos a punto de morir de aburrimeinto en aquel trabajo.

Nos llevó a una sala, pero lo más bizarro (sí, había algo más bizarro) es que entró con nostras y se puso a nuestro lado como otra sospechosa.

¿Que en qué nos parecíamos las que estábamos ahí? Además de ser todas del mismo sexo, claro.

Pues ¿vosotros habéis oído que el ADN de la mosca y el humano son idénticos en un porcentaje sorprendentemente alto? Pues os digo que no metieron ahí a una mosca (hembra, esos sí), porque las muy malandrinas no se están quietas.

Por cierto, si os estáis preguntando quién era la delincuente, pues no lo sé exactamente, pero vamos, que si os detienen alguna vez no os pongáis un chandall de yonqui.

2) Azafata de Congresos

Esto ocurrió hace algunos (bueno, muchísimos) años, cuando me hallaba dentro de los difusos márgenes de las atribuciones del trabajador de una correduría de seguros cualquiera.

Situémonos: Una joven y bella empleada triscaba como una cabritilla en su puesto de trabajo, junto a una compañera, contando los últimos momentos de sufrimiento antes de que la jornada laboral del jueves llegue a su fin en su cubículo, cuando un elemento de la jefatura de su empresa abre la puerta del despacho con gran ímpetu, y pregunta:

- ¿Dónde está Mª Carmen?

Esto quizá os suene, pero os recuerdo que:

a) Los jefes son mucho de abrir puertas con gran ímpetu.
b) En todos los trabajos hay siempre una Mª Carmen.

- Puees no está porque hoy no ha venido porque...

Él mientras no nos hacía ni caso a lo que le decíamos y nos miraba de pies a cabeza, mientras yo sentía un inquietante dejá vu, y nos interrumpió:

- Venid conmigo.

En este caso, nos ofrecíamos voluntarias para ir todo el fin de semana a la feria del automóvil más cutre de la historia, donde nuestra dinámica empresa familiar tendría un stand ofreciendo sus servicios en el dinámico sector del seguro de automoción.

¿Vosotros habéis visto Show Girls? ¿No? Pues yo sí, y si hubo algún incauto que cayera como yo, quizá recuerde una escena en la que la inocente chica (la inocente chica que se gana la vida quitándose el refajo delante de señores desocupados) va con una compañera a una feria automovilística. Entonces descubre que todo es una trampa para su decencia (y su refajo) para que "cenen" con una japonés y libidinoso y de esposa ausente y entonces ella..

Pues que como yo lo había visto, ahí iba yo, pensando que no iba volver mocita al pueblo. Y algo de razón tenía y digamos que igual que llegué, no salí, porque yo creo que ese fin de semana me salieron más varices que a la madre de la familia Von Trapp, de tantas horas que pasé de pie, repartiendo folletos.

Pero lo más bizarro (porque había algo más bizarro) es que se nos acabaron los folletos a las 11 de la mañana del domingo, y como no repartíamos nada más, nos quedamos como dos pasmarotes poniendo cara de póker durante un montón de horas.

Menos mal que absolutamente nadie nos miraba porque cerca de nosotros había un puesto con unos cochazos impresionantes, y a las "y medias" y a las "en puntos" una modelo se ponía a hacer el gamba al lado del coche.

Mientras padre de famili, tras padre de familia, se acercaba y con gesto picarón, preguntaba si la chica estaba incluida en el precio.

En una de estas los contamos: Siete en el pase de las 18:30.

Y ni uno solo japonés.

3) Inventariadora

Esto ocurrió hace muchos, muchos años, cuando (esto ya os lo sabéis), y entró de golpe (....), Mª Carmen no estaba (...) y me dijo (esta vez a mí sola)

- Vente conmigo.

Pero en esta ocasión lo que pasó es que me dio una cinta métrica. Sí, qué pasa, una cinta de esas que si la sueltas se enrolla sola (qué juerga me pasé haciendo eso), y me dijo que había que hacer un inventario de la oficina y que, utilizando a la potente herramienta de la que hacía entrega la empresa, un boli y un papel, tenía que apuntar todas las mesas, sillas, archivadores, etc... que encontrara a mi paso, apuntando de paso sus medidas.

Y ahí me quedé yo, con mi cintita métrica, sin compañera (qué malandrina Mª Carmen, que se había librado) y sin refajo (que no sé ni cómo son). Lo peor no fue ir por ahí midiendo muebles como una mide-muebles cualquiera, sino era entrar en despachos variados contando:

- Hola buenas, que vengo a mediros la mesa y que no sabéis el daño que hace que os den con una cinta de esta así que dejad ya de reiros por favor, por favor os lo pido.

Aún así, lo más bizarro de todo eso (sí, había algo más bizarro) es que el dueño de la empresa, que se llamaba Severino, era poseedor, además de un nombre infame y de una empresa, de una finca de caza inmensa, motivo por el cual acumulaba en su inmenso despacho, un número ingente de trozos de animales muertos, especialmente sus cuernos, que conservaba para demostrar su valor como cazador que abastece a la tribu.

Así que cuando me tocó entrar con mi súper equipo de medición al despacho de este bravo guerrero, oí una voz que me preguntaba inocentemente:

- ¿Qué? ¿Vas a medirle los cuernos a Severino?

4) Modelo de conduta

Esto ocurrió hace muchos años, dentro de los difusos... empresa editorial ... se abre la puerta... Mª Carmen absentista ... y bueno, que al final acompañamos al emisario de turno, mi compañero (esta vez es chico, por variar) y yo y nos dice que:

Nuestra dinámica empresa va a publicar un dinámico manual de español para extranjeros, de esos que tienen muchas fotitos y muchos recuadritos y muchas tonterías para que parezca que aprendes divirtiéndote y que el italiano es molto facile e divertente....

Pues resulta que les faltaban ilustraciones y no solo no contrataban a unos modelos profesionales, sino que íbamos a realizar las fotos en la mismas oficinas y había venido un sobrino (que sí, que sí) del director para hacerlas.

Así, durante una tarde fuimos farmaceúticos, médicos, investigadores (a la bata blanca le sacaron mucho partidito) , compañeros de trabajo (trabajo en plan... difuso), estudiantes, asistentes a una reunión de trabajo que estaban muy atentos con un boli debajo de la barbilla (¿quién no se concentra así?).

Lo más bizarro, porque había algo más bizarro, era que en todas las fotos salíamos como mirando algo juntos: Que éramos estudiantes, mirábamos juntos el mismo libro, investigadores: el mismo matraz...

Eso y el cachondeito de los compañeros que pasaban por el pasillo, claro.

Así que ya sabéis, si cae en vuestras manos un libro de español para extranjeros en los que en casi todas las fotos sale la misma parejita, es posible que yo sea la chica que tiene cara de "¿Soy la única que opina que Mª Carmen falta mucho últimamente?"

martes, 27 de septiembre de 2011

Es una lata el trabajar (I)

En un día como hoy, me vuelvo a plantear qué alternativa queda a trabajar. Y quién dice a trabajar, dice a buscar trabajo, estudiar, opositar o similares.

Resumiendo que no me refiero a encontrar OTRO trabajo, sino a una alternativa total al hecho de ganarse el pan con el sudor de tu frente. Algo particularmente asquerosito si además de ganarlo, lo produces.

Siendo sinceros, creo que, por lo menos en mi caso, mi alternativa más seria consiste en descubrir qué ocurrirá antes: Desahucio o muerte por inanición. Por algún motivo, he descartado ambas opciones.

Así que pasaremos a examinar las opciones que existen en el vox populi, las películas de después de comer y las cosas que le pasan al primo de un amigo.

Hoy hablaremos de las alternativas que llamaremos “de contacto” (iba a decir algo de un pegamento, pero la verdad es que era lamentable)

- Casarse con un millonario:

Durante mi lejana infancia se hablaba de esto con mucha normalidad, y llegué a convencerme de que este era un futuro personal digno, altamente productivo y por supuesto, realista.

A la larga ha resultado ser igual de realista prosperar así que trabajando duramente. Si no más.

Por supuesto que nos casaríamos con el típico millonario de guardia que todo el mundo conoce: Guapo y encantador, a la par que sumamente enamorado y fiel. Ahora que lo pienso, quizá todo esto se hubiera evitado si nuestros padres hubieran sido más estrictos y nos hubieran obligado a ir a la cama cuando empezaba "Hombre rico, hombre pobre".

En fin, que era un bonito momento lleno de esperanzas, yo en concreto, era feliz mientras conciliaba el sueño debajo de mi sábana de ositos, confiando en que algún día un yunque se decidiera a acertar de una puñetera vez encima del pesado del Correcaminos.

A veces incluso me atrevía a desear que justo en el momento del fatal accidente, casualmente le hubiera ido a visitar cierto canario mostruosamente braquicéfalo. Aaaaaaah, qué bonita aspiraciones infantiles.

Yo no sé las demás, pero yo por lo menos, jamás me preocupé de los aspectos logísticos (sobre todo porque no había oído esa palabra en mi vida, supongo), convencida de que mi belleza incontestable (hacía por lo menos tres entradas que no lo decía), me abriría todas las puertas.

Las puertas de esos lugares (fueran los que fueran) donde supongo que vivían esos ricos tan ricos y tan majetes, que deben estar escondidos porque yo por lo menos, no he visto uno en mi vida.

Los años, la divulgación popular del término “acuerdo prenupcial” y Fernández Tapias, además un espejo de cuerpo entero que pusieron en mi cuarto y una reducción drástica en mi nivel de estulticia me hicieron abandonar esta vana esperanza y por fin dedicarme a algo realista: Jugar a la primitiva.

- Vive de tus padres hasta que puedas vivir de tus hijos:

Esta opción es un clásico que han seguido grandes personalidades como Carmina Ordóñez.

Tiene dos inconvenientes: Requiere un alto grado de colaboración de tus padres y/o tus hijos y por supuesto y es imprescindible procrear lo antes posible.

- Heredar

Hay quien consigue llevar a cabo una variante de la opción gracias a familiares, pueden ser ceranos o no, pero si no lo son, mejor que tengan una relación inversamente proporcional a su riqueza.

Valorable: Experiencia demostrable en adulación sin límites y falta de vergüenza en la misma medida.

Una recomendación que creo que os resultará útil a los que toméis esta senda, y en la que a lo mejor no habéis caído, es que insultar y/o ignorar al familiar en cuestión, no es tan recomendable como pudiera parecer en un primer momento.

Sé que hay gente que desconoce este dato porque de hecho tuve un compañero de trabajo (sí, alguien había considerado que este ser podía desempeñar un puesto de trabajo) que andaba muy quejoso porque una tía suya acaba de fallecer.

Perdón, he pulsado el retorno de carro antes de acabar la frase, acababa de fallecer y no le había dejado nada en la herencia, motivo por el cual repetía cuál letanía por los pasillos, a quien quisiera oírle, y a quién no, pero al que pillara con las orejas puestas:

- Será japuta.

Japuta o palometa, que añadía una compañera.

Por si alguien tiene alguna duda sobre si esta opinión sobre la citada tía se la comunicó en vida, o si con una artera maniobra la conseguía disimular y ante ella aparecía como un sobrino ideal, el ínclito también nos deleitaba también con la historia de su otro tío, en este caso sin obitar, que también disponía de una posición económica desahogada.

Solía comenzar comparándolo no ya con un pescado azul, sino con el del papá de los siete cabritillos, que por cierto me pregunto dónde estaba cuando la señora cabritilla madre les dejó solos para hacer un mandao.

A lo que iba, el primo de los siete cabritillos solía continuar diciendo:

- Pero seguro que se lo deja todo a los curas. Los curas que siempre están haciéndole la pelota. (¿Y eso no te da una idea, alma cándida?)

- ¿Pero tú vas a verle alguna vez? ¿O le llamas, o algo?

- ¿Yo? (muy sorprendido) ¡No, nunca! (muy enfadado)

Sí, casi mejor que no le llames, porque total, para lo que le llamas…

lunes, 19 de septiembre de 2011

Quién puede llamar a mi puerta


Aquí estamos de nuevo, en el enésimo capítulo de “Gente rara que viene a mi casa, quién sabe por qué error kármico cometido en una mala tarde”.
Esto pasó en una vida anterior mía, cuando aun contemplaba a la humanidad con esperanza y no malgastaba mis neuronas en planes maquiavélicos para dominar al mundo y después someterlo a mis abyectos proyectos como la televisión educativa y la erradicación de los futbolistas que hacen declaraciones después del partido.
Y antes del partido. Y durante el partido. Bueno, de los futbolistas que hablan.
En definitiva, que era un claro espécimen de pazguata/pazguatae.
En aquellos tiempos, Oh, jóvenes discípulos, pagaba un alquiler exorbitante por vivir en el centro en lo que después pasó a llamarse mini-pisos y entonces sencillamente, mini-cuchitriles.
¡Ah, qué risa me produce ahora recordar aquello, desde mi mini-cuchitril en la periferia!
Pues érase que se era, que una tarde "de diario" me encontraba tranquilamente en mi vivienda habitual, cuando sonó el timbre.
Miré por la mirilla y naturalmente no vi absolutamente nada excepto una imagen sumamente distorsionada de algo que debía ser una faz humana. Creo que pregunté quién era, o abrí con la cadena puesta, o dije "Enséñame la patita" o cualquier otra imbecilidad por el estilo.
El de la patita en cuestión era lo que popularmente se conoce por "un señor", no en plan señorío y saber estar, sino en plan "dependiente de toda la vida de tienda de géneros de punto".
O sea, bajito, con un traje pasado de moda años antes de comprarlo, que le quedaba rabicorto (y digo yo, si son tan bajitos ¿Porqué todo les queda pequeño?).
El papel lo podría haber interpretado José Luis López Vázquez o Manolo Zarzo, pero sin maldita la gracia.
En fin, que ahí estaba yo, la jovencita, enfrentada a un hombre curtido en el ahora extinto mundo del “puerta a puerta”, preguntándome si cobraría seguro de óbitos o sería pasante de una notaría, hasta que habló:
Nota: A partir de ahora, para leer sus frases, por favor, pensad en el FMI o en cualquier otra cosa que más os enfade de este mundo ¿ya? Pues ahora exclamad:
- ¡El 3ºH! ¡Ya iba siendo hora! ¡Por fin les encuentro! Ya ha firmado todo el mundo y solo faltaba el 3º H.
¡Administrador! ¡Era administrador de fincas! Hombre, eso también le pegaba un montón.
¡Ya lo entendía todo! Era el administrador de la comunidad que tenía que ir piso por piso recopilando las firmas de todos los propietarios para hacer una de esas cosas que hacen los propietarios de los pisos cuando se reúnen en sus aquelarres.
En aquellos tiempos, al no ser propietaria (cómo ahora), y desconocer de qué iba la serie "Aquí no hay quién viva" y sus secuelas, (cómo ahora) mis únicos conocimientos relativos a semejantes aquelarres eran expresiones sueltas como "impago", "derrama" y "si te veo por la escalera te rajo".
Yo lo de la derrama siempre lo he asociado a que cuando era pequeña comprábamos la leche en una vaquería y había que hervirla en casa. Así que después de comprar bastantes libros, la distriubíamos en las ollas más grandes que teníamos y las poníamos al fuego.
Entonces mi madre, invariablemente, decía:
- Acordaros de la leche (sic)
E invariablemente, no nos acordábamos de la leche hasta que se oía un prfffff y el inconfundible olor de la leche quemada y derramda por los fogones, inundaba la cocina.
Pues para mí, eso era una derrama hasta que fui bastante mayorcita.
Mientras os contaba esta historia lacto-infantil, el tipo este ya ha entrado en casa de la jovenzuela inocentona, y la está metiendo una bronca de no te menées, insistiendo con el mismo tema.

- ¡Ya iba siendo hora! ¡Tercero hache!
Y recordad decid "Ter-ce-ro-haaa-che" como si dijérais "Hace falta tener po-ca-ver-gü-en-za"
- A ver ¡Nombre!
- No, no, yo no soy la propietaria del piso, vivo de alquiler.
Dije yo (que vuelvo a ser la protagonista de la historia) inocentemente, pensando que se desfacería el entuerto y dejaría de repetirme en qué piso vivía.
- ¿¡Y eso qué más da!? A ver NOMBRE
- Puuues Loquee
Todavía le di mis apellidos y algún dato más, pero una vaga lucecita se iba prendiendo en mi interior porque ¿Desde cuando los administradores piden firmas a los inquilinos?
Mientras, el actor de carácter (y menudo carácter) había rellenado un impreso y me gritó:
- FIRME
- Pero ¿Qué es esto?. Contesté yo, aún tímidamente.
Aguantando la inmensa repulsión que le causaba mi ignorancia, me miró con un asco - que solo he vuelto a ver alguna vez en la cara de alguna dependienta al abrir el probador y ver cómo me quedaban unos pantalones pitillo- y se dignó a decirme:
- Es no sé qué no sé cuántos.
No, no es que no quiera decirlo, o que no me acuerde, es que dijo más o menos eso, vamos, algo incomprensible, para que su víctima quedara (aún más) aturdida y avergonzada, no pidiera más explicaciones.
- Pero ¿no es el administrador?
- ¿El administrdor? No. ¡¡QUE FIRME!!
Entonces, de repente me di cuenta que en un tiempo récord ese hombre desconocido para mí, había pasado hasta el fondo (vale que el piso era pequeño, pero ¿cómo había llegado hasta ahí? Yo ni siquiera lo recordaba), se había sentado (¿De dónde habían salido esa mesa y una silla?) y estaba conociendo todos mis datos personales.
Y lo que era peor ¡No era el administrador! Que si lo llega a ser ¡No me hubiera preocupado que me hubiera metido en una bañera con hielo para estirparme un riñón!
En esos momentos pensé:
- Maripili, ¿qué te decía tu madre siempre?
- Que José Vélez tenía muy buena dentadura.
- No, lo otro.
- No sé, también le gustaba mucho el pelazo de El Puma. Se ve que solo le gustaban los hombre por partes.
- Que no, mujer, que nunca firmaras algo antes de leertelo.
- No, qué va, que va a decir eso mi madre. Lo que decía siempre era lo de la leche derramada...
- Bueno, pues si eso es lo que tienes, piensa en ello, hazte fuerte y di que no firmas.
- Vale, hasta luego subconsciente.

Así me armé de valor y le dije que no.
- ¡CÓMO QUE NO! ¿NO VA A FIRMAR?
- No, no, no, que no sé lo qué es y mi madre me decía ... (con voz muy flojita, muy acojonada, la verdad)
- Pues es una cosa que .... (otra vez algo incomprensible) y han firmado todos y tercero-hache
- No, no, que tengo la leche al fuego.
- Y le van a dar DIEZ MIL PESETAS.
Porque sí amigos, hubo una época en que 10.000 ptas era una cantidad que no movía a la risa.
- Noooo, que noooo.
- ¿NO QUIERE DIEZ MIL PESETAS?
¿Sabéis cuando en un culebrón la mala mira con mucha intensidad al infinito y dice "me provoca mata-la" pensando en la buena? Pues yo a este en ese momento, le debía estar provocando una hernia de hiato.
- Nooooo, váyase por favor.
Al final se fue dejándome, además de dándole muchas vueltas a la llave, confusa, con una confusión que (como aquel gran filósofo), me ha perdurado hasta hoy, cuando a veces me pregunto qué hubiera ocurrido si hubiera firmado aquello.
¿Formaría parte del siempre dinámico mercado de la trata de blancas?
¿Tendría una maleta llena de estampitas "todas iguales"?
¿Sería millonaria?
¿Tendría una olla exprés para calentar leche sin derramarla? ¿Acaso era tan solo una táctica de ventas muy agresiva? Bueno y tanto, como si realmente llega a entrar en la cocina, me clava un cuchillo jamonero.
Esto lo digo como si yo hubiera tenido un jamón en casa jamás.
Pues mira, no lo sé, pero a mí ese tema, por mucho que lo pienso, os juro que me huele más a chamusquina que la leche aquella, y por lo que sé, no es la única derrama que huele mal.

martes, 13 de septiembre de 2011

Lenguajes Informativos

¿Recordáis, oh mis incontestablemente bellos seguidores que en una ocasión tratamos el apasionante tema de cómo hablar en "lenguajes informáticos"?

En aquella ocasión aprendimos a manejar con soltura el esquivo parlamento de los aborígenes informáticos, para así poder domeñarlos y estar un paso más cerca de nuestro común objetivo: El control del universo.

Nota: Si es la primera vez que entras en este blog y no has entendido una palabra, te advierto que no, que no hay enlace o tutorial alguno que explique esto que has leído.

En definitiva, amigos, hoy ha llegado el día en que debemos ascender un paso más en el escalafón y aprender a comunicarnos, ya no con los técnicos, sino directamente con las aplicaciones informáticas y así, alcanzar lo que cualquier ser humano ha soñado desde aquel día que desmontó por primera vez un juguete encontrado en los Phoskitos, y descubrió que era incapaz de volver a montar ese ingenio diabólico compuesto por, al menos dos piezas: El dominio de las máquinas.

No, no creáis que voy a castigaros con algún interminable manual de instrucciones en 20 idiomas diferentes al castellano, que solo nos serviría a todos para saber cómo se dice "conectar a la red" en tagalo, y en caso de ser estético, tatuárnoslo (Y contarle a la gente que significa lo primero que se os ocurra esa mañana).

No, me refiero a cuando las aplicaciones informáticas nos hablan directamente, a nosotros, dueños de la creación pero incapaces de descifrar sus crípticos mensajes.

Hay quién cree que leyéndolos al revés, invocas al maligno, nada más lejos de la realidad, no hace falta descifrarlo de ninguna forma extraña, leídos directamente ya son suficientemente satánicos.

Veamos este primer ejemplo con el que el word intenta vacilarnos cuando intentamos imprimir una receta de paella mixta vegana.

la impresora no ha respondido todavía, pero puede que el programa de Ms Office pueda continuar sin la información de la impresora

¿Desea continuar o esperar a la impresora? Sí No

Evidentemente, aquí podemos hacer dos cosas: Continuar o esperar a la impresora. Porque esperar entender si con el sí continúas o esperas a la impresora, eso sí que no va a pasar.

Y mientras esperáis que la impresora venga andando, os presento mi error favorito de todos los tiempos, el error 60:

60: Error en el método '~' del objeto '~'

Sí, el lo que tiene el método ~, que es de lo más puñetero. Bueno en general, todo lo del objeto ~ es un poco conflictivo.

Aún así no le guardo rencor, y le tengo tanto cariño que cuando lo veo siempre exclamo "Anda, el error en el método ummm del objeto ummm"

El día menos pensado le pido una cita al 60 este.

Error de conversión de carácter a número numérico

¿Alguna vez os ha salido? ¿Sí? Desde luego, menuda cabeza. Mira que intentar convertir un carácter a un número numérico, cuando todo el mundo sabe que solo se puede hacer la conversión de un carácter caracteroso a un número numerario, o numeroso, no sé.

Tanto intentar conversiones más sorprendentes que las de Madonna y al final, pasa lo que pasa, y tu base de datos te termina por decir un día:

-12805 - ORA-12805: el servidor de consultas paralelas ha muerto inesperadamente

Pues las muertes inesperadas son las más sentidas, ya se sabe.

Otros directamente solo se crearon para vacilarnos, ahora os voy a desvelar un secreto que pocos conocían hasta ahora, todos los equipos informáticos del mundo tienen un micrófono incorporado, algunos bajo la inocente apariencia de adminículos que jamás hemos sabido para qué sirven.

Pues bien, estos micrófonos están programados para activarse automáticamente y grabar cuántas veces seguidas somos capaces de leer esta frase:

Una asociación de parámetros posicionales no puede seguir a una asociación especificada

Porque la posición de la parte contratante de la primera posición no especificada. Lo siento, no estoy capacitada para acabar esta frase.

¿Cómo creéis que empezó el dominio de la tierra por los de Terminator? Cachondeándose de la gente así.

Pues bien, dije que en algo os iba a ayudar y aquí va mi consejo: Hay que aprender a utilizar la fuerza de tu enemigo, o algo por el estilo. No sé, cuando lo decían los niños esos a los que envidiaba tanto por aprender artes marciales, y poder poner en práctica mi querencia por la destrucción.

Resumiendo: Se le puede dar la vuelta a la tortilla y puedes utilizarlos como mantras para conseguir que la mente se vacíe, porque a mí eso del árbol que si hace ruido o no lo hace, qué queréis que os diga, que dependerá del árbol, a lo mejor un arbustillo de esos que se ponen en los parques de los nuevos barrios que les dicen a esas jóvenes parejas que ven los pisos de la manita y les dicen "Estos árboles darán mucha sombra" y se callan "que será lo único que ocurrá después de que hayáis conseguido terminar de pagar la hipoteca".

Os dejo con el último para que lo estudiéis en profundidad y me hagáis una redacción de 157 palabras y media sobre el tema:

No puede definirse el tipo definido por el usuario

Y si lo he definido ¿Cómo puede no estar definido?, pensará alguno.

Ah, amigos, es que he dicho que había que vaciar la mente, que no vale pensar, o ¿A qué creías que se referían cuando decían aquello de "los ordenadores no piensan"?

sábado, 27 de agosto de 2011

Yo fui feliz, pero ahora, como que no


Pues sí, mis vacaciones acabaron tiempo ha.

Ubi sunt mis noches cuando era la estrella de fiestas a bordo del yate de algún millonario que anduviera de guardia por las islas griega. Pues supongo que sunt donde siempre han estado, en las películas de las que me he sacado semejantes fantasías.


La cosa es que volví a este mundo laboral que tan pocas alegrías nos da día a día. Menos el 31, o el 30, según el mes, a veces, el 28.

Llegué, saludé al algunos compañeros, contesté a sus preguntas con varios:

- Bien, gracias, muy cortas

Escuché varios

- ¿Has estado en la playa? Se te nota, qué morena estás.

Y exactamente el mismo número de:

- ¿Has estado en la playa? No se te nota nada, no estás morena

A todos les dije que sí, que claro, me senté en mi sitio, revisé el correo y seguidamente afronté mi vuelta con la entereza y el optimismo que me son característicos.

A eso de las nueve y media, vino uno de sistemas a cambiarme el teclado y me dijo que o bien dejaba de llorar encima de todos los teclados que me traían, o le pagaba el equipo entero.

Desde entones cienes de problemas técnicos me han impedido la actualización de este blog, además de tres razones fundamentales:

- La vagancia, la vagancia y la vagancia.

Pero basta ya de llantos, quejas y after-sun. Vayamos a lo que realmente importa ¿Qué ha buscado la gente en internet durante estos meses? Y recordad, copio las consultas tal cual las escribieron, con todas sus… peculiaridades gráficas.

Allá van:

la vida amorosa y personal d alex ubago

Pues verás, primero se casó con una chica muy rubia y muy mona pero resultó que al final era lesbiana y cuando salió del armario, casi consideró conveniente abandonarle, aún así, tuvieron un niño muy rubio que no salía en demasiados capítulos.

Después parecía que había encontrado el amor verdadero, pero hubo muchos dimes y diretes y al final ella le dejó, y él, venga a componer canciones de “Me has dejado” y a poner cara de pena, aunque la verdad es que la cara esa ya la traía de serie.

Aunque, entre nosotros, desde que Rachel le dejó, no te creas que se metió a cartujo que dentro de muno del artisteo se liga mucho, pero se ha dado cuenta que le sale muy ventajoso poner esas carillas y ahí sigue el hombre, venga a dar pena al personal.

bombonas de plastico para disfraz de butanero

Ya se sabe que a los niños les gusta disfrazarse de cosas que les gustaría ser: Spiderman, astronauta, futbolista, Superman, pirata, butanero…

Nota, por si el del disfraz ya ha cumplido los 17 y ha pensado que es muy gracioso y barato pedirle el mono naranja a su cuñado. Una cosa chato: ¿Te imaginas lo cómodo que puede ser cargar dos bombonas durante toda la noche? Y lo que es peor, la de veces que vas a escuchar aquello de “Una para el segundo”

buenas vacaciones tu te vas, yo sola me quedare

No sé por qué pero algo me dice que en el fondo, en el fondo, no le acaba de desear buenas vacaciones.


cosas que los hombres nos gustaria escuchar peor no hay forma

Ya sé que te haría ilusión, pero cariño ¿Te importa que les diga a mis padres que no vamos a pasar con ellos ningún día en navidades, ni vamos al pueblo en verano?

especias caducadas hace 9 años

“Peor, no hay forma”

como se llaman los poligono del 21 al 30

- Liosos?

- Difíciles?

- Desde luego, el de trigonometría ha ido a pillar?

laura pausini es hija de julio iglesias?

Hombre, con todos los que tiene, si fuera un poco más joven y se presentara toda vestida de blanco en la playa esa en la que se hacen fotos, lo mismo hasta pasaba desapercibida y colaba.

Y ahora en serio ¿qué va a ser hija? ¿No ves que no se apellidan igual? Aaaaaaaaay

Sí, hombre y qué más ¡Y Álex Ubago es familia de Ross el de Friends!


nota para decir que estoy de vacaciones

“Estoy de vacaciones, yo me voy y tú sola te quedarás”

¿que ropa me llevo para vacaciones en ibiza en velero

¡Cielos! Esta tipa sí ha tenido las vacaciones que me inventé yo.


que opinan los psicoanalistas cuando reconocen su derecho a vacaciones

¿Opinan que tienen derecho a vacaciones? No me hagáis caso, lo digo así, a lo loco…

algo que encontré en un establecimiento que me hizo entender tantas cosas!!.y así ahorrar en terapias, si tan solo lo hubiera encontrado antes!!..

¡Qué me dices! ¡Qué notición! Cuenta, cuenta. Ay, no espera, que me tengo que ahora mismo no puedo, que me estoy comprando el Abdominaiser 2000, la Super Mopa 3000 y la faja del doctor Ming.

el colegio me mando al psicoanlista quye me van a hacer aser

¿Al psicoanalista? Te deberían mandar a la clase de refuerzo de lengua, hijo.

esta mal encelarse porque tu esposo tiene una amiga es muy descarada

¿Cómo de descarada? ¿Se pone una flor en el escote y se sienta en las rodillas de todos los hombres casados mientras dice “Creo que estoy un poco piripiii”?

Tranquila, esa es mi tía Puri, que mira que le tenemos dicho que no haga esto en las bodas

llaman preguntando por manolo

Y qué ¿se puede, o no se puede poner?

los bañadores encojen?

¡Y tanto que encogen! Y el que diga lo contrario, es que no es tu verdadero amigo.

parque donde haciendo una accion

¿Qué? ¿Qué asion te hacen aser en ese parque?

me e enamorado de un monitor de spinning

Madre mía, qué éxito, los monitores de spinning


tema de reggaeton que dice catapum o algo asi

Lo malo es que diga lo que diga yo ahora, no puedo parecer graciosa.

quero que me muestre zapatilla y quiero que me monja en pie monito

Todavía estoy intentando dilucidar si este tío es:

- Zoofílico

- Mon-jafílico

- Pie-fílico

O sencillamente se quiere comprar unas zapatillas.

Pero a mí me ha dejado sumida en un mar de dudas.

que hago si me enamoro de un dios nordico?

¿Te has enamorado de un dios nórdico o estás haciendo una encuesta sobre enamoramientos de seres de ficción?

¿O has visto hace poco la película “Thor”? En ese caso, déjalo, ya está casado con Elsa Pataky y si eres muy descarada, se encela.

¿Has probado a ir a clases de spinning?

que es un texto incognico

Esto mismo que has escrito tú, majo


Y mi favorita, por supuesto es la del "catapún o algo así" ¿La vuestra?